Familiares de los reclusos han expresado sus preocupaciones ante lo que podrían ser indicios de un encubrimiento por parte de las autoridades penitenciarias respecto a la cantidad real de víctimas tras el devastador incendio que golpeó la Cárcel de la Victoria.
Según relatos obtenidos desde el interior de la prisión, se ha informado sobre la construcción de una fosa en la parte trasera de las instalaciones, lo que sugiere que el número de fallecidos podría ser mayor al oficialmente reportado hasta el momento. Este testimonio, grabado clandestinamente desde una pared de la cárcel, proviene de internos que afirman haber presenciado personalmente la excavación de esta fosa común en el patio del centro penitenciario.
Estas revelaciones han generado una profunda preocupación entre los familiares de los reclusos, quienes temen que las autoridades estén ocultando la verdadera magnitud de la tragedia. Ante la gravedad de estas acusaciones y el potencial riesgo para la integridad de las autoridades penitenciarias, se hace imperativo llevar a cabo una investigación exhaustiva y transparente que esclarezca los hechos y garantice justicia para todas las víctimas y sus familias.
Este incidente pone de manifiesto la necesidad de una mayor transparencia y rendición de cuentas en el sistema penitenciario, así como la importancia de salvaguardar los derechos humanos de todos los individuos bajo custodia del Estado.