La vicepresidenta Raquel Peña aclaró que la posible privatización de las empresas distribuidoras de electricidad (Edenorte, Edesur, y Edeeste) ha sido malinterpretada, y que el objetivo del Gobierno es mejorar su administración mediante la instalación de medidores de energía, liderado por Celso Marranzini.
Sobre los apagones, Peña los atribuyó a la falta de inversiones en el sector eléctrico durante el mandato de Luis Abinader y en administraciones anteriores, señalando que la ola de calor ha incrementado la demanda de energía. Pidió a los ciudadanos cumplir con el pago de sus facturas eléctricas, ya que es un servicio costoso para el Estado.
Además, entregó 13 camionetas al Cuerpo Especializado de Control de Combustibles y Comercio de Mercancías (CECCOM) para combatir el contrabando, destacando los avances logrados gracias a la Mesa de Ilícito creada por el Decreto 275-21.